Muy adaptable, este híbrido es ideal para mantener una producción continua
Los diferentes tipos de clima en cada región y las condiciones climáticas requieren del productor una gran planificación en el cultivo para asegurar su éxito, desde la siembra hasta la cosecha. Este cuidado comienza con la elección de la variedad que se va a plantar y que mejor se ajusta a las condiciones de producción local. En este sentido, cultivares cada vez más adaptables han tenido un gran éxito entre los productores, como es el caso de la remolacha Kestrel de Sakata.
Kestrel tiene forma de raíz redondeada, piel suave y excelente color interno y externo, características muy apreciadas por el mercado. Según Heriton Felisbino, gerente de productos de Sakata Seed Sudamerica, este cultivar es un híbrido completo, que ofrece al agricultor una gran ventaja competitiva: mayor seguridad y estabilidad en la producción. “Tiene una excelente adaptación a los diferentes climas y épocas del año, ayudando así al productor a obtener una mayor asertividad en el cultivo, permitiendo un suministro constante al mercado durante todo el año”, explica.
El profesional también destaca que la variedad tiene otros atractivos diferenciales de producción. “Sus hojas vigorosas y erguidas permiten una mayor circulación de aire, lo que ayuda a controlar y prevenir enfermedades. Esta característica también permite al agricultor trabajar con un mayor número de plantas por área, contribuyendo significativamente a una mayor productividad”, agrega.
Más informaciones sobre los nutrientes de la remolacha
La remolacha tiene vitaminas A, vitaminas del complejo B y C, además de buenas cantidades de sales minerales, como sodio, magnesio, potasio, zinc y hierro, principalmente. La remolacha también es rica en fibra, agentes anticancerígenos y antioxidantes. Estas características lo convierten en una fuente importante de nutrientes para componer una dieta más saludable.