En 2012, la productora Bertha Rojas, de la ciudad de Tarma en Perú, comenzó a producir plántulas de brócoli para el cultivo en sus propios campos. La calidad de sus plántulas llamó tanto la atención de sus vecinos que comenzó a venderlas también a terceros.
La actividad se generalizó aún más cuando, en 2018, Bertha comenzó a usar el brócoli Avenger en su propiedad, debido al buen desempeño en el campo de este híbrido. Fue una apuesta segura! A partir de entonces, el viverista se hizo conocido en toda la meseta central, ampliando su rendimiento comercial. Actualmente, el vivero de Bertha es el más popular en la región, con dos unidades, ubicadas en Llacsacaca y Matara, ambas en la ciudad de Tarma.
Según ella, la variedad Avenger se ha adaptado muy bien a la región, incluso para plantar durante todo el año, debido a su robustez, buen tamaño de la cabeza, floretes uniformes, resistencia a enfermedades, ausencia de tallo hueco y, sobre todo, alta post-longevidad. cosecha. “Desde nuestra región hasta la ciudad de Lima, el viaje puede tomar de 1 a 4 días, esto se debe a que en períodos de lluvia intensa, el deslizamiento de barro y piedras dificulta el tráfico. Sin embargo, la excelente durabilidad del material permite que el producto llegue en buenas condiciones al mercado, permitiendo su máximo uso”, explica.
Bertha también afirma que, debido a que es un vegetal con alto valor nutricional, es muy buscado en el mercado, por lo tanto, tiene un gran potencial comercial en la región. «El cultivo del brócoli es muy favorable y con la calidad de Avenger, los productores podemos garantizar la rentabilidad, incluso con variaciones de precios», concluye.